Mezclamos literatura y gastronomía»La Taverna Pervers tiene forma de pasillo: en lugar de puertas, tiene mesas, y en todas te sirven platos de felicidad gastronómica. Prepara la mandíbula, el cuchillo y el tenedor Tanto puedes comer una tortilla de patatas à la minute, unas croquetas de pollo, huevo y jamón que van a ocupar un lugar en tu corazón desde ya, una butifarra con hummus de judías blancas flameadas con vermú que me parecen tan fantásticas que las quiero de pendientes (comestibles, claro está).