Una vuelta a la cocina más sencilla y tradicional. Su mantra, hacer de lo cotidiano como un almuerzo algo especial. Uno de sus éxitos: El huevo micuit con espárragos verdes e idiazabal.
Casco Antiguo
¿Una sandwichería? Sí. De horario non-stop. Una buena opción para empezar el día desayunando alguno de sus bowls o terminar cenando uno de sus deliciosas propuestas entre panes. Aquí, cualquier hora del día es buena para picar algo.
Un local que combina la tradición de un patio un andaluz con toques exóticos. Con la comida sucede lo mismo, en su carta podrás encontrar desde un salmorejo hasta un delicioso poke.
Casaplata es el lugar perfecto para degustar la mejor gastronomía o tomarte unos cócteles con buena música.
La decoración te hará ir pero repetirás por su exquisita cocina de mercado. Su secreto ibérico de bellota, ¡sin palabras!
Una pastelería especializada en los dulces elaborados en los conventos de clausura de Sevilla.
Pasteles tradicionales que concentran la esencia repostera sevillana a base de ingredientes tan sencillos como huevos, harina, azúcar, almendras, canela o cabello de ángel. El mejor souvenir que llevarse a casa.